Miguel Mena es periodista en Radio Zaragoza y además, en sus ratos libres, escribe novelas.

Pablo Ferrer en su entrevista nos recomendó hablar con Miguel por su arte a la hora de contar historias.

¿Cómo empezaste en la radio?

Me metí a través de los musicales porque estaba muy metido en el mundo de la música. Llevo 30 años en Radio Zaragoza. Empecé haciendo musicales y ya después fui haciendo diferentes cosas dentro de la radio. Ahora hago un programa de fin de semana muy centrado en el ocio, en el “buen rollo”, por decirlo de alguna manera. Se llama “A vivir Aragón”, lo hago desde 2008. Empecé haciendo un programa que se llamaba “Parafernalia”, después pasé e hacer “Estudio de guardia”, que fue un programa muy popular en su momento de llamadas de oyentes. Es el programa que más tiempo he hecho, 18 años. Ahora es una sección dentro del programa “Hoy por hoy Zaragoza”. Después hice un programa de tardes, “Aragón a las siete”, y después este. También he hecho otros programas musicales como el Desván. Lo hacía para Cadena Dial a toda España y durante una temporada también se emitió vía satélite para 14 países de América del Sur. Era sobre música de los 60. En realidad en la radio yo he hecho de todo, he hecho hasta un programa de economía. A mí siempre me ha gustado más la cultura pero una vez que entras en la radio, haces lo que te toca.

¿Por qué decidiste ser periodista?

Mi vocación me aparece sobre los 14, 15 años en el colegio. Yo me crie en Madrid y estudié en un colegio en el que había un par de profesores muy activos que hacían un par de revistas.  Empecé a escribir en esas revistas y fui viendo que me gustaba mucho escribir, contar cosas, lo tuve claro.

¿Qué es lo que más te gusta de la radio?

La radio tiene una cosa que la diferencia de la tele y de la prensa, que es la familiaridad. En la prensa si escribes durante mucho tiempo adquieres prestigio, eres una firma. En la televisión, en cuanto sales, ya eres conocido. Y la radio lo que tiene es que requiere mucho tiempo, es como una lluvia fina, y lo que te convierte es en familiar, no en popular ni conocido. Te hace como un miembro de la familia. La gente que se acerca a mí como oyente me trata como si me conociera. Muchas veces me han dicho, “¡cuántas veces he comido contigo”, claro 18 años en el programa del mediodía…Yo tenía una tía que siempre me decía “¡ahí te tengo, encima de la lavadora!” porque tenía el aparato de radio justo ahí.

¿Qué es lo que más recuerdas de estos 30 años en la radio?

A mí me han quedado en la memoria de “Estudio de guardia” muchas situaciones de cosas cotidianas, de vivencias, de llamadas, de casos duras… Eso me ha quedado mucho en la memoria. Tampoco grandes personajes. Me ha tocado entrevistar a gente importante, y me ha gustado, pero lo que más me queda en la memoria son las llamadas de los oyentes.

Has visto en 30 años la evolución de la radio, ¿cómo crees que le ha afectado el nuevo entorno digital?

Mi percepción es que a la prensa internet le ha hecho, no sé si daño o mucha competencia. Y a la radio no sólo no le ha hecho competencia si no que le ha beneficiado por dos cosas. Ahora te pueden escuchar de repente en Nueva York o en Australia. Y además, ahora gracias a los podcast te pueden escuchar en cualquier momento. La prensa está viendo ahora cómo se ubica. Ahora estamos en un momento de cambio en los medios de comunicación. Me da la impresión de que estamos en una época de cambios, que esto desembocará en algo, pero no sé en qué. No creo que sea en algo malo.

Además de la radio, escribes novelas ¿por qué empezaste a escribir?

Siempre he sido muy lector, siempre, desde pequeño. Además en el colegio lo que hacía era escribir y eso fue lo que me animó a ser periodista. Aunque la primera novela la escribí en el 92, en el año 85 la radio publicó un libro con mis guiones de la radio, ese es mi primer libro en realidad. Yo tenía el gusanillo de intentar escribir una novela. Mi primera novela salió en el 92, pero yo la empecé a escribir en el 87. Fue un proceso muy largo, encima no salió bien. Yo me lancé a las bravas y por eso me llevó tanto tiempo y no salió bien. Pero ya me picó el gusanillo y partir de ahí ya no puedes parar, creas otro hábito.

¿Te has planteado dejar la radio y dedicarte a escribir?

No, escribir es un complemento. Me gusta escribir pero no podría dedicarme ocho horas al día. Además a mí me encanta la radio, la redacción, el “roce” con los compañeros, el intercambio, las bromas… y no podría cambiarlo por una jornada como escritor. Me faltaría el contacto con mis compañeros.

¿Cómo te organizas para escribir una nueva novela?

Voy abriendo carpetas con ideas, luego hay ideas que desarrollas e ideas que no. No me pongo un plazo. Además luego hay que adaptarse al ritmo de las editoriales. Yo procuro escribir todos los días, o escribir o apuntar cosas sobre el tema del que trata la novela. También es muy importante la parte de documentación, esquematización… Luego la parte más dura es cuando te pones a redactar. Suelo escribir en mi casa pero puedo escribir en cualquier sitio. Para anotar ideas lo puedo hacer en cualquier sitio, luego ya la parte de escribir eso ya requiere más concentración. Por ejemplo, tengo que apagar el teléfono.

¿Y ya estás pensando ya en otro libro?

Ahora sale “Foto Movida”, que se presenta en 27 de febrero a las 20 h en el Teatro Principal. Es la tercera novela que hago ambientada en la transición. Y ya estoy recopilando información para hacer una novela de los años 60.

Miguel Menahttp://www.miguelmena.com/