Pepín Banzo es un artista polifacético. En sus espectáculos está el sólo pero es como si estuviera con un equipo de personas inmenso.

Juako Malavirgen en su entrevista nos recomendó hablar con Pepín por su capacidad de unificar tantas artes.

¿En qué consiste tu arte?

Hombre yo la gracia que se supone que tengo es que hago un poco de todo, de hecho, en mi espectáculo es lo que trato de hacer. Soy una persona, creo que soy una persona, y voy yo sólo en el espectáculo y la gente en los espectáculos flipa porque hago muchas cosas: toco muchos instrumentos, canto, hago humor, hago magia… menos bailar, que se me da peor. Soy como una revista de cabaret pero en persona y sin estriptis, porque ahí ya pierdo.

¿Cómo comenzaste?

Yo siempre digo que hago todo esto porque soy y he sido hijo y nieto único  y me aburría mogollón y dije, pues algo tengo que hacer. Desde pequeño he estado ligado a la música por mi padre, siempre he tenido muchos instrumentos en casa, tocaba el piano, el bajo eléctrico y después he ido a mi bola, más o menos puedo tocar o, mejor dicho, hacer sonar casi todos. No soy un virtuoso pero los hago sonar, afinar y funcionar. Esto ha sido con la música pero ha sido con todo igual. De crio estaba siempre fascinado con la magia y me compraba libros, siempre autodidacta. Entonces cuando tenía unos 12 años salió una colección que se llamaba “El mundo mágico de Tamariz” y bueno pues me enganché, sobre todo, a los libros de magia, tengo una biblioteca bien maja, libro que veo libro que me compro. Y así con todo.

¿En qué momento decides dedicarte a lo que haces hoy en día?

Sobre todo, cuando vi que era capaz de hacer un personaje.  Todo empezó con la música. Con 17 años monté un grupo de música con unos amiguetes en Zuera. Queríamos grabar un disco y no teníamos un duro así que decidimos hacer verbenas para poder sacar dinero y a lo tonto a lo tonto estuvimos diez años haciendo verbenas, lo convertimos en una profesión. Luego la orquesta derivó en meterme en Ixo Rai de gaitero y después estuve en La Orquestina de Fabirol. Me costaba mucho hablar en público porque, aunque no lo parezca, me cuesta hablar cuando no estoy metido en el personaje, cuando lo tengo puedo hacer lo que me dé la gana, no me da vergüenza. Esto me costó descubrirlo. Hasta ahí siempre estaba como músico en segunda fila hasta que he aprendido a crear el personaje. En distintos libros he ido viendo cómo crearlo, cómo hacer un guion, como hacer gracia, que eso me sale de forma natural, pero hasta que no lo descubrí por mí mismo no fui capaz de hacerlo. Ese miedo lo he heredado de mi padre, que canta increíble pero lo pasa fatal y no canta en público.

La música te viene por parte de tu padre ¿y la parte cómica de quién te viene?

Siempre digo que por parte de abuela paterna. MI abuela Pilar era actriz de estar por casa. Mi madre también es bastante payasica, lo digo con cariño, además no me gusta usar la palabra payaso como algo despectivo.

 

¿Creas el personaje y cómo llegas a ser lo que eres hoy?

Fue de casualidad. Después de Ixo Rai empecé a hacer cosas de teatro y fui cogiendo tablas y el personaje salió. Monté un grupo con un chico de Zaragoza que se llamaba Les Rubitos y lo que hacíamos era interactuar los dos y después me lancé yo solo y ya pues hasta hoy. Me costó porque no es fácil salir sólo y entretener dos horas al público pero me lo tomo como un reto y me adapto al público. Tengo distintos espectáculos y voy combinando partes. Me gusta mucho improvisar y creo que eso es parte de mi éxito. Intento sorprender.

¿Cómo has conseguido que te conozcan en tantos sitios?

Me vino muy bien la tele, aquí en Aragón Televisión había un programa que se llamaba “Dándolo todo” donde buscaban a un artista completo. Un amiguete que trabajaba en la tele, en otro programa, me animó a participar. Me costó decidirme pero al final me presenté y la verdad es que fue pasar de la noche al día. Salí dos días en la tele y de repente empezaron a salir más actuaciones que nunca, me sacaban en los medios. Fueron meses muy intensos y duros pero me vino muy bien. Y ya he ido moviéndome y enlazando unas cosas con otras. Como hago tantas cosas y de una manera diferente pues me funciona. También me muevo mucho, intento estar siempre haciendo cosas nuevas.

También ayuda que estás en todas las redes sociales, ¿qué te aportan?

Creo que para mi trabajo es esencial. Pienso que es necesario hoy en día estar en redes sociales, estar en contacto con la gente.  Voy contando lo que hago y la gente cuando se entera pues viene a los espectáculos.

Pepín Banzohttp://pepinbanzo.com/